Mi suegro es español. Tuvo una infancia difícil. A los 6 años quedó en España al cuidado de unas tías, y a los 16 vino (solo) a nuestro país, a reencontrarse con sus padres. Mi suegra es Argentina. Se casaron muy jóvenes y formaron una familia. La vida no les fue fácil. Pero lucharon (y luchan) para seguir hacia adelante...
¿Por qué cuento esto?
Cuando tuve la posibilidad de participar en el Certamen de Poesía organizado por el Centro Cultural Andalucía, de Buenos Aires, pensé... tengo que escribir sobre esto... Tantas veces hablamos alguna tarde de domingo sobre lo que se sentía, esas ganas de volver al país de origen, ese acento (en este caso español) que nunca se pierde ni con el paso de los años, esa nostalgia que permanece en el corazón y que nos lleva a pensar, como dice Antonio, mi suegro, que "cuando me muera, arrojen mis cenizas en alguna playa, que el océano me trajo y el océano me llevará de vuelta a mi tierra...", esa partecita de otro lugar que no conocemos, pero queda arraigada en hijos y nietos de inmigrantes por conocerla a través del corazón...
Mi suegro no es andaluz (licencia de escritora que me permití, porque uno de los requisitos del Certamen era que el poema fuera sobre Andalucía). No esperen encontrar en la poesía "palabras difíciles" ni rebusques literarios. Está escrito solamente desgranando sentimientos (en general, como escribo yo). Lo que sí tiene es una cierta musicalidad española, como forma de respeto y homenaje (y porque me gusta).
Y bueno, en el Concurso gané una segunda mención (El primer premio lo ganó mi papá, Héctor Ronquillo, ¡hija 'e tigre resulté!). Y me dije: para honrar a todos los inmigrantes, tengo que postearlo... Y ahí va...
El acento de mi España
España de mis amores
con tu tierra verde y alta,
y, entre el verde, los sinuosos
caminos de la esperanza...
Allá quedaste tan lejos
y en ti se quedó mi infancia
con sabor a fruta dulce,
a procesión, a esperanza,
a pies descalzos de niño
llevando a pastar las vacas.
¡Ay, corazón andaluz,
de recuerdos y nostalgias!
España, mi tierra dulce...
Hace tanto que besé
por última vez tus playas,
y me embarqué hacia otros rumbos,
me enamoré en otras aguas...
Hoy, mis hijos y mis nietos
te viven con mis palabras...
Reflejados en mis ojos
ven tus paisajes soleados,
de azul tu cielo y tus aguas,
de piedra gris el camino,
y de verdes pastizales
las laderas de montañas...
¡Ay, corazón andaluz,
de recuerdos y nostalgias!
Esta tierra me dio mucho,
mas nunca logró borrarme
el acento de mi España,
y nada puede evitar
que al son de las castañuelas
se me suelte alguna lágrima...
Si se adelanta la muerte,
yo le pido a quien me quiera
que eche a volar mis cenizas
por ahí, en alguna playa...
Y me deje descansando...
Yo sabré cómo llegar
por mares embravecidos
a los brazos de mi España.
¿Por qué cuento esto?
Cuando tuve la posibilidad de participar en el Certamen de Poesía organizado por el Centro Cultural Andalucía, de Buenos Aires, pensé... tengo que escribir sobre esto... Tantas veces hablamos alguna tarde de domingo sobre lo que se sentía, esas ganas de volver al país de origen, ese acento (en este caso español) que nunca se pierde ni con el paso de los años, esa nostalgia que permanece en el corazón y que nos lleva a pensar, como dice Antonio, mi suegro, que "cuando me muera, arrojen mis cenizas en alguna playa, que el océano me trajo y el océano me llevará de vuelta a mi tierra...", esa partecita de otro lugar que no conocemos, pero queda arraigada en hijos y nietos de inmigrantes por conocerla a través del corazón...
Mi suegro no es andaluz (licencia de escritora que me permití, porque uno de los requisitos del Certamen era que el poema fuera sobre Andalucía). No esperen encontrar en la poesía "palabras difíciles" ni rebusques literarios. Está escrito solamente desgranando sentimientos (en general, como escribo yo). Lo que sí tiene es una cierta musicalidad española, como forma de respeto y homenaje (y porque me gusta).
Y bueno, en el Concurso gané una segunda mención (El primer premio lo ganó mi papá, Héctor Ronquillo, ¡hija 'e tigre resulté!). Y me dije: para honrar a todos los inmigrantes, tengo que postearlo... Y ahí va...
El acento de mi España
España de mis amores
con tu tierra verde y alta,
y, entre el verde, los sinuosos
caminos de la esperanza...
Allá quedaste tan lejos
y en ti se quedó mi infancia
con sabor a fruta dulce,
a procesión, a esperanza,
a pies descalzos de niño
llevando a pastar las vacas.
¡Ay, corazón andaluz,
de recuerdos y nostalgias!
España, mi tierra dulce...
Hace tanto que besé
por última vez tus playas,
y me embarqué hacia otros rumbos,
me enamoré en otras aguas...
Hoy, mis hijos y mis nietos
te viven con mis palabras...
Reflejados en mis ojos
ven tus paisajes soleados,
de azul tu cielo y tus aguas,
de piedra gris el camino,
y de verdes pastizales
las laderas de montañas...
¡Ay, corazón andaluz,
de recuerdos y nostalgias!
Esta tierra me dio mucho,
mas nunca logró borrarme
el acento de mi España,
y nada puede evitar
que al son de las castañuelas
se me suelte alguna lágrima...
Si se adelanta la muerte,
yo le pido a quien me quiera
que eche a volar mis cenizas
por ahí, en alguna playa...
Y me deje descansando...
Yo sabré cómo llegar
por mares embravecidos
a los brazos de mi España.
12 comentarios:
Esta publicación tuya mi hizo recordar un escrito de Eduardo Galeano que quiero compartir contigo...
Desde siempre, las mariposas y las golondrinas y los flamencos vuelan huyendo del frío, año tras año, y nadan las ballenas en busca de otra mar y los salmones y las truchas en busca de su río. Ellos viajan miles de leguas, por los libres caminos del aire y del agua.
No son libres, en cambio, los caminos del éxodo humano.
En inmensas caravanas, marchan los fugitivos de la vida imposible.
Viajan desde el sur hacia el norte y desde el sol naciente hacia el poniente.
Les han robado su lugar en el mundo. Han sido despojados de sus trabajos y sus tierras. Muchos huyen de las guerras, pero muchos más huyen de los salarios exterminados y de los suelos arrasados.
Los náufragos de la globalización peregrinan inventando caminos, queriendo casa, golpeando puertas: las puertas que se abren, mágicamente, al paso del dinero, se cierran en sus narices. Algunos consiguen colarse. Otros son cadáveres que la mar entrega a las orillas prohibidas, o cuerpos sin nombre que yacen bajo la tierra en el otro mundo adonde querían llegar.
Sebastiao Salgado los ha fotografiado, en cuarenta países, durante varios años. De su largo trabajo, quedan trescientas imágenes de esta inmensa desventura humana caben, todas, en un segundo.
Suma solamente un segundo toda la luz que ha entrado en la cámara, a lo largo de tantas fotografías: apenas una guiñada en los ojos del sol, no más que un instantito en la memoria del tiempo.
que dijo tu suegro de esto? lo leyó?
hay veces que lamento muchisimo no ser afecto a las poseias..
¡Qué bello, Gianni, el escrito de Galeano1! Me resulta tan bello, y triste... y para reflexionar... y leer... y releer, una y otra vez.
Gracias por pasar. Un beso.
Ro
Hola, Briks!
No, mi suegro nunca lo leyó... Ocurre que después de mi separación (sept. de 2006)no tuve más contacto con mis suegros... lamentablemente, porque los quiero mucho, pero... las cosas se dieron así... Yo me quedé con las charlas que teníamos antes (estuve casada por 14 años, de los cuales casi todos los fines de semana lo pasábamos en la casa de ellos) pero recién este año escribí el poema... Por otro lado, sé que a medida que pasan los años él va sintiendo más nostalgia por cosas que le quedaron en el pasado, y no quiero causarle tristeza con esto... Si en algún momento siento que disfrutaría el poema, sin dudas se lo mostraré.
Y... no te preocupes por no ser afecto a las poesías... a mi no me gusta el rugby... ja, ja, ja...
Prometo que muy pronto escribiré prosa...
Lo que pasa es que durante muchos años escribí como encriptado en poesías lo que sentía para que nadie más que yo lo entendiera... y eso me llevó a ser más dúctil en esto.
Besos.
Ro
GRACIAS POR COMPARTIR TU PAGINA , ALLI SE ENCUENTRA COSAS DEL ALMA YO SOY DE LUJAN , AHORA ESTOY EN ALICANTE ESPAÑA , POR 3 MESES VUELVO EN MARZO , TE INVITO A QUEPASES POR MIS BLOG, UN ABRAZO DESDE EL CORAZON ,MARIO
Hermoso! FELICITACIONES! me recuerdan palabras de Serrat,de Tu nombre me sabe a hierba y de Mediterráneo...y a mi enterradme sin duelo entre la playa y el cielo en la ladera de un monte mas alto que el horizonte, quiero tener buena vista, mi cuerpo será camino le daré verde a los pinos y amarillo a la genista. abrazzzzzzote.
PD:Con el hermano Briks somos dos negados a la poesia!
Gracias, Mario, por pasar por mi blog...
Me interesan mucho los tuyos, que voy visitando uno a uno leyendo las distintas publicaciones.
Suerte en España y hasta muy pronto!
Ro
Hola, Minombre... De Briks, hombre rudo, rugbier, y etc. etc. me imaginaba que no fuera adepto a la poesía... Pero de usted, con esa sensibilidad, admirador del Nano, con las cosas que escribe, jamás lo hubiera pensado!!!
En fin... tendré que escribir más prosa...
(Gracias por el comentario... ¡Qué hermoso...! Yo también pienso igual... enterradme sin duelo... que mi cuerpo sea camino... ¡Hermoso!).
Besoooote.
Ro
che !!
que el Hierba tambien es ex rugbier y yo puedo emocionarme con...eeeh con...
un amanecer?
no, espere...con.. UN CACHORRO !
no tempoco
con un buen traste
ahi esta !
con eso me emociono.
no suma?
Hola, Briks...
A lo que yo me refiero es a lo que se ve claramente en el blog de minombresabeahierba... Uno lo abre, conmovedores videos sobre las despedidas, las partidas, el aprender a decir adiós... Y a la derecha... el regalo que usted le hizo para navidad (que expone claramente qué es lo que a usted lo conmueve... ja, ja, ja)... Igual... reconozco que, en el fondo, usted también tiene un corazón sensible... si no, se aburriría como un hongo solitario en mi blog...
Cariños...
Ro
Hola Ro:
Esta poesía es preciosa, si algún día dejase España me encantaría tener los mismos sentimientos de tu suegro hacia este país.
Describes perfectamente Andalucía, aunque yo no sea andaluz.
Te felicito.
Besos.
Fernando.
Gracias, Fernando... Hay algo muy interno que me une a España... Tal vez en alguna vida pasada estuve allí (yo creo en eso).
Me encanta el flamenco, las sevillanas, hasta el acento español me suena como algo propio.
Un gran cariño.
Ro
Publicar un comentario