martes, 4 de enero de 2011

No te vayas sin darme un beso...



Besos. Más besos. Todo mi mundo se reduce al remolino de sus besos de despedida de los que nunca quisiera alejarme...
- Te amo... mucho - y es la primera vez que se lo escucho decir así...
- Yo también - y es la primera vez que soy yo la que dice "yo también"...
- Y yo más - ¿escuché bien? No importa. No importa si escuché bien. O si es mi imaginación o mi deseo del yo más.
No importa. Me quedará rondando durante días, durante noches... para aferrarme al recuerdo de lo que nunca será.

ROXANA LAURA RONQUILLO